Exploramos las ventajas del plato de ducha a ras de suelo. Estos platos han cambiado el diseño de los baños modernos. Aportan una estética limpia y son fácilmente accesibles para todos.
Son perfectos para personas mayores o con discapacidades. Ofrecen una experiencia de ducha cómoda y segura. La limpieza de los baños se hace más fácil gracias a su diseño.
Reducen juntas y desniveles, creando un espacio más higiénico. Instalar estos platos resulta económico. Esto los hace atractivos para renovaciones.
Los platos de ducha extraplanos vienen en varios formatos, texturas y colores. Pueden personalizarse, garantizando una solución única para tu baño.
Un diseño efectivo asegura la evacuación eficiente del agua. Esto ayuda a mantener tu baño limpio y funcional.
Qué es un plato a ras de suelo
Un plato a ras de suelo se coloca a la misma altura que el piso del baño. Ofrece una ducha integrada que cambia por completo cómo disfrutas de tu baño. Al no tener escalones, es más seguro y cómodo, ya que evita caídas.
Este tipo de plato previene el acumulamiento de agua, enfrentando el problema de humedad y hongos. Se adapta a cualquier estilo de baño. Esto se debe a la variedad de materiales como resinas y piedra natural.
Los platos de ducha a ras de suelo están en auge, sobre todo en casas de personas con dificultades de movimiento. Su diseño minimalista y práctico los hace preferidos para ambientes modernos y sin barreras.

Beneficios en el diseño del baño
Un plato de ducha a ras de suelo mejora mucho el diseño del baño. Hace que el espacio se vea más grande y abierto. Esto es perfecto para baños pequeños, donde cada espacio es importante.
Este diseño moderno combina con la tendencia del minimalismo. Su superficie lisa y continua crea un aspecto elegante. Es más fácil de limpiar porque tiene menos rincones donde se acumula la suciedad.

Es muy accesible, especialmente para personas mayores o con discapacidad. También ayuda a ahorrar espacio gracias a las mamparas fijas transparentes. Para un buen drenaje, lo mejor es contactar a un profesional experto.
Los platos de ducha de resina son duraderos y seguros, resistentes a manchas y no se resbalan. Hay modelos para todos los presupuestos, como los de Torvisco y Nudespol. Un plato de ducha a ras de suelo hace el baño más bonito y práctico.
Comparativa con otros tipos
Al comparar platos de ducha, es clave ver las diferencias. Los platos a ras de suelo eliminan el escalón de los modelos tradicionales. Esto mejora la accesibilidad y aumenta la seguridad, especialmente para personas con movilidad reducida.
Los platos convencionales son menos estéticos y más difíciles de limpiar que los modernos a ras de suelo. La instalación de estos últimos suele ser más barata. Esto los hace una opción atractiva para quienes remodelan sus baños sin querer gastar mucho.
Los platos a ras de suelo vienen en diversos tamaños y materiales. Asealia ofrece desde 70×70 cm hasta platos personalizados de hasta 2000 mm. Esta flexibilidad da opciones no disponibles en los modelos convencionales.
Instalar un plato de ducha a ras de suelo cuesta entre 500 € y 2000 €. La mano de obra varía entre 150 € y 250 €. Estos platos sobresalen por su durabilidad y son fáciles de limpiar, ahorrando mucho a largo plazo.
Criterios | Platos a ras de suelo | Platos de ducha convencionales |
---|---|---|
Accesibilidad | ✔️ Mejora notable | ❌ Escalón presente |
Estética | ✔️ Variedad y modernidad | ❌ Menos atractivos visualmente |
Instalación | ✔️ Más económica | ❌ Puede ser costosa |
Facilidad de limpieza | ✔️ Muy fácil | ❌ Más complicada |
Opciones de tamaño | ✔️ Personalizables | ❌ Limitadas |

Recomendaciones para su uso
Si piensas en poner un plato de ducha, sigue estas recomendaciones para usar platos de ducha. Lo primero es contratar a profesionales con experiencia. Ellos asegurarán una instalación correcta.
Una mala instalación puede causar muchos problemas. Por ejemplo, el agua podría estancarse o acumularse basura en el desagüe. Esto también puede ser un riesgo para la seguridad en el baño.
Es clave elegir platos con superficies que no resbalen y tener mamparas adecuadas. Esto ayuda a evitar que el agua se salga y hace el baño más seguro. Es especialmente importante para personas mayores o con dificultades para moverse.
Por último, no te olvides del mantenimiento. Limpiar los acabados a menudo y revisar el desagüe mejora la apariencia y el funcionamiento. Estas acciones simples son clave para mantener tu ducha en buen estado.